LA TRAVESIA DE MI VIDA AL LADO DEL MEJOR PROFESOR RURAL

 

Prof. Celestino Alfredo Laura Zegarra

Hola me llamo Alfredo Yasmani Laura C.   y quiero compartir con ustedes  un poco de mi  vida, nací  y fui  criado en medio de mucho amor hasta los 7 años, rodeado de mis hermanos(as) Elsa, Rigo, Juan, Elias, Elena, y mis hermanitas Jhoana y Estefanie, cuando fui apartado de mi madre Juana Condori  (+),  porque mi padre que ejercía la sacrificada Profesión de Docencia en el Area Rural en varias ocasiones, según lo que contaba, en su cuarto donde vivía solo, vio al mismísimo demonio.

Mi padre preocupado y de miedo nos contó esa vivencia y no quiso volver a su trabajo, entonces nació  la idea de todos de que alguien debía acompañarlo en su trabajo, y fui yó el elegido, el menor de los 4 hermanos varones, con apenas 7 años me vi obligado a separarme de mi Madre y hermanos(as)  con los cuales yo había vivido hasta ese entonces y a partir de ese momento comencé la TRAVESIA DE MI VIDA  que duraría  hasta mis 16 años, una travesía que en un comienzo fue dolorosa, pero que  ahora después de tantos años a pesar  de haber pasado climas extremos entre frío, calor días de hambre, cansancio, sueño, llanto por el hecho de ir de un lado a otro cada año, digo y creo, que fui  muy afortunado, afortunado porque durante esos 7 u 8 años que fui al lado de mi padre pude ver  y conocer los lugares más hermosos de nuestra La Paz, lugares  que a mi edad, muchos tal vez la vieron pero solo en fotografías o videos, pero yo pude verlos  y sentirlos en carne propia, como las inmensas planicies altiplánicas donde abundan el ganado camélido y ovino donde el silbido del viento chocando con las pajas bravas emiten un sonido único e inolvidable, los valles más hermosos entre serranías donde abundan las frutas como la tuna, choclo, durazno o los hermosos Nor y Sud yungas con sus espesas selvas, canto de pájaros de increíbles variedades y frutas que uno los podía tener al alcance de la mano bajo los árboles, pero el más hermoso recuerdo fue de una población Santa Rosa de Quilo Quilo para mí, el mismísimo paraíso, entre cerros, montes y ríos que parecían piscinas y donde las mariposas de variados colores y tamaños volaban  en tus narices, de donde solo se podía salir a la ciudad una vez al año.

Fueron los años más hermosos de mi vida, al lado de  mi padre que   fue un modelo a seguir un profesor  en todo el sentido de la palabra que ejercía su profesión con total dedicación y esmero en su diaria formación  a niños y jóvenes, lugares donde apenas se contaba con aulas en mal estado, sin puertas, ni ventanas,  en ocasiones ni pizarrones, pero las ganas de enseñar y aprender era lo que no faltaba, poblaciones con distintas costumbres y tradiciones de donde pude aprender a vivir  y admirar la vida, con todo y con nada al mismo tiempo. 

Fue una experiencia única, que desearía que otros también la vivan pero al mismo tiempo que nó, que otros la vivan, para que admiren los hermosos y distintos climas, paisajes y culturas que tiene nuestra Bolivia y cómo es la vida de un profesor del Area Rural, en el caso de mi padre, que año tras año lo cambiaban de un lado a otro, teniendo que apartarse de su esposa e hijos. 

Esta historia culmina con la triste noticia de la muerte de mi madre, estando mi padre y yo  en una lejana población de los  yungas Villa Barrientos, a partir de ese año ya nada fue igual, por el dolor de perder a mi madre y mi padre a su esposa, me vine a la ciudad donde continué mi vida y a día de hoy me encuentro en la formación docente, siguiendo los pasos de mi mentor, mi padre, un profesor del área rural que dío su juventud, su vida aún dejando su familia, por la educación, por la formación de adolescentes del área rural, quienes hoy en día bien pudieran estar manejando la riendas de nuestro país como nuestro presidente Evo Morales Ayma, Profesor Celestino Alfredo Laura Zegarra

“Un paisaje se conquista con las suelas del zapato, y dejando de lado la ciudad,  no con las ruedas del automóvil ni aferrándose solo a lo que vemos”

(A.  Yasmani Laura C.)